En caso de «detectar una incongruencia entre los gastos e ingresos», el Servicio de Administración Tributaria podría solicitar la información de los depósitos con el propósito de evitar algún tipo de fraude fiscal
Sin embargo, «todos aquellos depósitos que se realizan para gastos de padres a hijos o viceversa, pagos por venta de catálogo (cosméticos, utensilios de cocina y del hogar, aceites esenciales, entre otros), tandas o préstamos personales no se les vigilará, ni cobrará algún tipo de impuesto».
A pesar de ello, los contribuyentes que estén en proceso de revisión, los bancos tendrán la obligación informarle al SAT de manera mensual los ingresos en efectivo para una fiscalización más exacta que coadyuve en las auditorías que se estén llevando a cabo en ese momento
Para esto, los bancos deberán informar al SAT antes del día 17 de cada mes. Con esta modificación se busca agilizar y hacer más eficientes a las auditorías con el objetivo de reducir la evasión fiscal. Cuidado con tus depósitos De acuerdo con el SAT y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), las instituciones bancarias deben reportar a la autoridad fiscal la detección de depósitos superiores a 15,000 pesos, que sean recibidos por los usuarios.
El problema con las «tandas» además de que son un mecanismo informal de ahorro surge cuando los miembros de ésta realizan los depósitos a tu cuenta en una fecha determinada, lo que provoca una discrepancia entre tus ingresos reales y la acumulación de dinero en la cuenta bancaria
¿Cómo podrás comprobar esta lanita?
-Una de las recomendaciones es que al organizar las populares tandas, lo ideal será realizar transacciones electrónicas y pedir a los involucrados que guarden el comprobante de depósitos. Se trata de una idea para poder comprobar ingresos y no tener problemas al realizar la declaración anual.
-Otra manera es utilizar cheques, ya que es un proceso que también puede ser comprobado con facilidad.
Sin embargo, para cuidar tu bolsillo, la Condusef recomienda a los usuarios invertir su capital en instituciones financieras reguladas y evitar algunas otras alternativas como las llamadas pirámides o flor de la abundancia.